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La Casa del Adolescente cierra sus puertas. En tiempos en que la comunidad reclama atención y contención para los menores, el Intendente interino, Rafael de Vito, decidió cerrar la Casa. A pocas semanas de que este mismo intendente se comprometiera, en mesas de dialogo convocadas por el mismo Departamento Ejecutivo, a atender la problemática juvenil, se cierra la Casa del Adolescente. A meses de la temporada, cuando los chicos de entre 12 y 17 años quedan a merced de la invasión de los turistas y el consumo desmedido, la Casa dejará de funcionar.
El vienes ultimo, la subsecretaria de Acción Social, Patricia Gómez, y la Directora de la institución, Mónica López, citaron a los docentes a una reunión. La sub secretaria llegó al encuentro una hora más tarde para comunicar a los profesores que el dictado de talleres culminará el 31 de Octubre y la Casa, el 30 de Noviembre. Sin mayor capacidad para brindar respuestas dignas de una jerárquica, la funcionaria se retiró excusándose de atender cuestiones familiares a pesar de que los profesionales requerían de mejores explicaciones que un “esto es una herencia de la gestión anterior (en referencia al ex subsecretario, Lito Mobrici)” o un “ya no hay dinero para pagar los sueldos de los talleristas”. Antes de retirarse, Patricia Gómez solicitó a los docentes que no comunicaran aún la novedad a sus alumnos… ¿Cuándo sugiere la señora que lo hagamos? ¿La última semana? ¿El ultimo día, tal vez? ¿Nos invitó a ser farsantes? ¿A sonreírles como si nada pasara? ¿A hacerlos trabajar para las muestras de Noviembre que nunca ocurrirán? Si su pretensión era hacernos participes de las mentiras de este gobierno, la funcionaria se equivocó y mucho. Un detalle a tener en cuenta: la directora, Mónica López, no asistió en la reunión ni dio explicaciones por su ausencia.
El equipo interdisciplinario de la secretaria, que no lleva más de algunos meses de trabajo en la Casa, explicó a los presentes algo ya sabido y repetido cada vez que surgen inconvenientes: La Municipalidad de Pinamar firmó un convenio en el 2007 con la Subsecretaría del Menor dependiente del Ministerio de Desarrollo Humano de la Pcia de Bs. As. Ese acuerdo implicaba la apertura de un Centro de día para la atención de jóvenes con diversas problemáticas sociales. Las vueltas de la política hicieron que este proyecto se abriera a la adolescencia de Pinamar y que incluyera talleres para los que así lo requerían.
Dos veces se inauguró la Casa del Adolescente en dos localidades distintas pero bajo las mismas consignas. “Este es un emprendimiento que nace a partir de entender el ineludible compromiso que toda sociedad tiene de ofrecer a sus jóvenes un espacio de participación, contención e inserción comunitaria a través de la cultura, el trabajo, la recreación y el encuentro con el otro” decía un comunicado emitido por la Secretaria de Acción Social a cargo, en ese entonces, de Analía Guevara. Y continuaba: “El convenio que la Municipalidad de Pinamar firmó con la Subsecretaria del Menor ha permitido que hoy se lleve adelante esta iniciativa (…). Si bien la Casa ofrece diversos talleres gratuitos como escultura, teatro, cocina, música, radio, etc. (…), serán los jóvenes quienes irán dando personalidad a este Centro”.
El ex sub secretario de Acción Social, Lito Mobrici, se comprometió ante los docentes y la comunidad, a mantener la Casa abierta durante todo el año. En marzo último dijo a la prensa: “La idea es que este año la Casa tenga continuidad y no se corte en la temporada. Pinamar no tiene universidades y no todos nuestros chicos pueden ir a estudiar por eso queremos brindar talleres que impliquen, también, una salida laboral (…). La Casa del Adolescente estará abierta a todos los jóvenes que así lo deseen”.
Los talleres pertenecían a la Dirección de Cultura. En agosto, sin explicación alguna, pasaron al área de Acción Social que hoy aduce no tener fondos para mantener ni a la institución ni a los docentes que “debieran estar agradecidos” de haber trabajado estos meses ya que el proyecto original presentado a Provincia no contemplaba el dictado de talleres.
Si bien es cierto y comprensible que el Servicio de Protección de los Derechos de Niños y Adolescentes del Municipio requiera de los fondos que la Provincia destina a la apertura de una Casa de día, no es menos cierto que la Casa del Adolescente demostró, en dos ocasiones y a pesar de todos los impedimentos, que es un espacio necesario y requerido por los jóvenes del Partido. Si la Provincia no destina fondos para la adolescencia de Pinamar, es la Municipalidad, entonces, quien debe hacerlo.
Es hora de dejar de hablar y comprometer la palabra para no cumplirla. La comunidad reclama la atención de sus adolescentes. El Poder Ejecutivo respondió a la comunidad que lo hará. ¿Esta es la manera? ¿Cerrando la única institución que atiende en forma exclusiva a jóvenes con y sin carencias afectivas, con y sin carencias económicas, con y sin problemas sociales? Los jóvenes participan en convivencia y con el compromiso cierto de los profesores que ven pasar autoridades incompetentes y carentes de toda responsabilidad ante ellos y la comunidad. Ya está claro que esta gestión dispone en forma caprichosa y arbitraria, no solo de sus empleados, sino de los adolescentes y sus padres que cuentan con esta institución para enfrentar los tiempos difíciles que vivimos.
Mariana Dufour
DNI 18.568.380
